Los grandes parques nacionales de Estados Unidos, como Yellowstone, Yosemite y el Gran Cañón, ofrecen paisajes impresionantes y una biodiversidad única. Estos vastos espacios naturales son destinos icónicos que atraen a millones de visitantes cada año, quienes buscan aventuras al aire libre y la oportunidad de conectarse con la naturaleza. Protegidos por su valor ecológico y cultural, estos parques son tesoros nacionales que destacan la belleza y la diversidad del país.